Vinos vivos, viñas con historia

Proyecto familiar iniciado en 2015, Viñedos Hontza materializa nuestro deseo de “cerrar los ciclos” - de la viña a la copa - y de valorar nuestro terreno elaborando vinos auténticos. Nuestro trabajo empieza en el viñedo y consiste ante todo en el cuidado de la tierra. Ponemos en práctica los principios de biodinámica. La uva está seleccionada en la viña y vendimiada en familia en pequeños recipientes, con el fin de preservar todas sus cualidades. La elaboración de nuestros vinos sigue la misma lógica de calidad: intervención mínima durante todo el proceso de elaboración.

Nuestros Principios

Honestidad. 

Honestidad con nosotros mismos, con nuestros compañeros y con los consumidores.

Agricultura Biodinámica. 

Seguimos aprendiendo cada día todo lo que esta agricultura nos enseña. La elaboración de los preparados y su aplicación, forman parte de algunos de nuestros rituales de conexión con la naturaleza.

Vino Natural. 

La autenticidad se prolonga hasta la bodega: aprendemos y creamos técnicas de elaboración con la mínima intervención.

Calidad.

Garantizamos una calidad tanto a nivel nutricional y de salud como a nivel sensorial.

"Elaboramos vinos naturales."

Sin ningún químico añadido durante todo el proceso de fermentación. Esta se produce naturalmente, gracias a las levaduras indígenas, sin acidificantes, ni clarificantes, ni estabilizantes, ni sulfitos añadidos. Nuestro vino no está filtrado para garantizar toda su autenticidad.

Nuestro compromiso

Somos pequeños productores. Nuestra filosofía de trabajo se basa en el respeto por la tierra, el desarrollo rural, el consumo sostenible y local y la revalorización del patrimonio natural de nuestro pueblo y de sus alrededores. Cada vez más, este se ve amenazado por nuevas técnicas intensivas. Nuestro compromiso con la tierra hace parte de nuestro modo de vida y consiste en cultivar y elaborar vinos capaces de expresar la tipicidad de este terroir. 

Localización

HONTZA - Bodega artesanal y familiar, Viñedos Hontza es la primera y única bodega de Labraza, Villa medieval al Este de Rioja Alavesa (País Vasco) situado a 650 metros de altura y caracterizado por su microclima y una gran biodiversidad.